El pago que hizo el ciudadano fue cercano a los $4.700.000=. Este hecho se logró tras un proceso de investigación por parte de las autoridades y por la reclamación de Metrolínea.
Los hechos de vandalismo cometidos en contra de Metrolínea no quedarán en la impunidad. Muestra de ello es la reciente actuación emitida por el Juzgado Tercero Penal Municipal de Bucaramanga con Funciones de Conocimiento, en la que se avaló un acuerdo entre Metrolínea como víctima y el victimario y se logró una indemnización en favor de la entidad por cerca de $4.700.000= por el delito de daño en bien ajeno agravado.
Los hechos que derivaron en esta actuación administrativa ocurrieron el 24 de septiembre de 2018, cuando un hombre conducía un vehículo y desde allí disparó con una pistola de aire comprimido contra los vidrios de la Estación Diamante, los partió y se dio a la fuga.
Este hecho se reportó ante las autoridades, quienes finalmente detuvieron al sospechoso, hallaron el arma con la que se cometió el delito y lo pusieron a disposición de la Fiscalía General de la Nación.
Metrolínea interpuso la denuncia penal en contra del sindicado por el delito de daño en bien ajeno agravado. Tras las investigaciones y el proceso judicial que encaró Metrolínea como víctima, se logró que quien cometió el delito indemnizara a la entidad con un valor económico que subsanara los daños y demás perjuicios ocasionados al Sistema.
“Esta actuación procesal significa que todos aquellos que han atacado la infraestructura de Metrolínea van a tener que responder ante las autoridades por sus hechos. Tras un trabajo investigativo juicioso de las autoridades y de Metrolínea se logra que esta persona responda por los daños que causó a los bienes públicos, aquellos que están puestos al servicio de los ciudadanos”, manifestó la gerente de Metrolínea, Emilcen Jaimes Caballero.
En cuanto a los actos vandálicos cometidos durante las manifestaciones de este año, Metrolínea ya interpuso las denuncias penales respectivas y las autoridades avanzan en las investigaciones, con el propósito de detener a los responsables para que paguen por lo cometido.